Pregunta: ¿Es importante el ajuste de micrones al rociar desinfectante sobre superficies duras?
Doug Lerch, experto en productos de KleenMark
Para hacerlo bien, sí, el tamaño de la micra es increíblemente importante cuando se aplican desinfectantes con un rociador (electrostático, con bomba manual o de otro tipo).
Primero hablemos de micrones en el nivel más básico, no es necesario complicar demasiado las cosas. Esencialmente, una micra es la forma en que describimos el tamaño de una sola gota. Cuanto más grande sea la gota, mayor será el número de micrones.
El tamaño de la partícula es relevante porque afecta qué tan bien funciona el desinfectante y también cómo “se desplaza” en el aire. La configuración de micrones en un rociador también afecta la profundidad con la que se cubre una superficie con el desinfectante.
La mayoría de los rociadores de bomba manual, lo que suele ver en las ferreterías, generalmente no tienen boquillas que produzcan micrones lo suficientemente pequeños como para rociar desinfectante con precisión. La razón es que a menudo se usan para rociar insecticidas y pesticidas. Si las gotas fueran tan pequeñas, se dispersarían de manera desigual y se desplazarían con el viento o la corriente de aire interior.
Las botellas rociadoras y los rociadores con bomba manual a menudo dejan burbujas de desinfectante en superficies duras. Un gran ejemplo son los gimnasios, donde se utilizan habitualmente botellas de spray. Debido a que los micrones no son lo suficientemente pequeños, se forman burbujas cuando rocía los bancos para desinfectarlos. Cualquier superficie dentro de esa burbuja no se desinfecta. Eso significa que el COVID-19 y otros gérmenes no se eliminan y la cobertura es inconsistente.
Con configuraciones de micrones más altas, tampoco está rociando tantas partículas. Por ejemplo, si el nivel de micrones se duplica (digamos, de 250 a 500), produce solo una octava parte de las gotas. Eso significa una cobertura menos completa de la superficie.
Pulverizadores electrostáticos y micrones
Utilizamos pulverizadores electrostáticos con boquillas que nos permiten fijarlas a 40, 80 y 110 micras. Esto es especialmente importante con un pulverizador electrostático porque las gotas están sobrecargadas, lo que significa que buscan superficies neutrales o cargadas negativamente y se "adhieren" a ellas. Si no está seguro de si un pulverizador electrostático es la herramienta adecuada para el trabajo, consulte: "¿Necesito un pulverizador electrostático para la desinfección?"
Las pequeñas gotas se dispersan uniformemente desde un rociador electrostático, porque se repelen entre sí en el aire. Por lo tanto, no se “aglutinan” ni forman gotas más grandes. El resultado final es una cobertura de superficie más uniforme.
Sabrá que tiene la configuración perfecta cuando la superficie esté completamente cubierta pero no demasiado saturada, sin importar el dispositivo de aplicación.